Tuesday, April 8, 2008

Marianita Camina y Nico Nada


Marianita no se aguanta y pelea contra la inercia y el peso del pañal para levantarse y dar sus primeros pasos. Todavia se apoya contra todo lo que puede. Las paredes, la mesa, su carrito de Dora etc. Inclusive se da las mañas para subirse a la cama de Nico y a la silla grande de su cuarto. A Nicolás le fascina que lo persigan. Y Mariana hace todo lo posible por perseguirlo. Obviamente muchas veces la distancia, la profundidad del espacio y mientras aprende a manejar el peso del cuerpo se ha dado muchos totazos contra el mundo y todo lo demas que hay en el medio. Mientras Nicolás no se solto hasta el año, todo parece indicar que Mariana le ganará en ponerse de pie y descubrir todo este nuevo mundo. Se acerca a gran velocidad el primer año de la chiquita Mariana. En este momento tenemos dos opciones. Un grupo de exalumnos de Texas Tech esta planeando una reunión para el 3 de mayo y va a incluir a toda la familia. Nos gustaria viajar a Dallas y ver viejos amigos. Nuestra segunda opción es celebrar aqui en The Woodlands. Lo que si no existe duda es a cerca del motivo de la fiestica: Hello Kitty. Aunque Nico disfrutó mucho su primera clase de natación, tres dias después terminó con bronqitis. Ayer estuvo donde el medico y le dieron antibiotico, broncodilatadores y jarabe pues ha tenido una tos muy persistente en las noches. Tenemos que reprogramar los planes de bicicleta de este fin de semana pues la doctora recomendó que no jugara afuera hasta el Lunes.

Thursday, April 3, 2008

No Dar Papaya

Ya era hora de comer y los tres extranjeros en algún lugar en África se disponían a atravesar la calle en busca de comida. Era tarde y después de un día largo de trabajo, era hora de relajarse y comer. La tarde caía bastante rápido y cada minuto que pasaba se hacia mas y mas oscuro. Después de esperar por más de media hora la camioneta que los llevara al casino de la compañía, decidieron aventurarse a caminar varias cuadras. Tal vez no la mejor opción, pero el hambre, el cansancio y la hora apremiaban y ya la cabeza no responde igual. Aunque se encontraban acompañados de un local, eso no sirvió de mucho en el momento en que fueron sorprendidos por dos bandidos en moto. A unas pocas cuadras de llegar, los malandros aprovecharon la oscuridad y tomaron por asalto a los caminantes. Con revolver en mano, los extranjeros fueron amenazados para que entregaran sus pertenencias. Para amedrentar a las victimas, uno de los asaltantes disparó el arma de fuego al piso. Afortunadamente ninguna persona salió lastimada o herida. Únicamente sus pertenencias desaparecieron. Este incidente le ocurrió a compañeros de trabajo en su última visita a Luanda. Para algunos la primera y tal vez la ultima visita a Luanda. Mala o buena suerte, el incidente dejo muchas lecciones aprendidas. Pero la primordial lección fue: No dar papaya. También hubo exceso de confianza en pensar que un grupo de cuatro personas no podría ser atracado. Yo personalmente hice esa caminata con varios gringuitos la última vez que estuve allí. Claro que nunca caminamos de noche, solamente a medio día. Tuvimos suerte como las personas que también habían acabado de caminar y llegar al destino sin inconvenientes antes de que este incidente ocurriera.